FE EN LA PROMESA, Marzo 27

Centro Internacional Sembradores de Fe y Vida

 

Marzo 27

FE EN LA PROMESA

Lecturas bíblicas: Marcos 11: 19-26.

Canción: Cree, todo es posible

 

Marcos 11:24  Por eso os digo que todas las cosas por las que oréis y pidáis, creed que ya las habéis recibido, y os serán concedidas.

 

Cuenta la historia de un niño que muy pronto iba a cumplir diez años de edad, su abuela le prometió un álbum de sellos para las Navidades. Llegaron las Navidades, pero no recibió ni el álbum ni carta de la abuela. Pero él no dijo ni una palabra de queja, sino que cuando sus compañeros de juego venían a ver sus regalos, su madre quedó sorprendida al oír que, después de haber hablado de éste y aquél regalo de diversas personas amigas, el niño añadía: «Y un álbum de sellos de mi abuelita.»

 Habiéndole oído decir esto varias veces, lo llamé aparte y le dije: «Jorge, tú no has recibido el álbum de la abuela. ¿Por qué dices eso?» Hubo una mueca y que mueca de sorpresa en su rostro, como si estuviese extrañado de que le hiciese tal pregunta, y contestó: «Está bien, mamá, la abuelita lo dijo y es lo mismo que si lo hubiese recibido.» No repliqué una palabra por no lastimar su confianza.

Pasó un mes y no se oyó nada acerca del álbum. Por fin, un día, como para probar su fe y al mismo tiempo extrañando la madre de que la abuela no le hubiese enviado el álbum, le dijo: «Jorge, me parece que la abuela ha olvidado su promesa.» «No, mamá —replicó con voz firme—, ella no la ha olvidado.» 

Observé aquella cara querida y confiada por un rato, la cual parecía desafiar, la posibilidad que la madre había sugerido. Finalmente, un rayo de luz iluminó su rostro y dijo: «Mamá, ¿no crees que sería conveniente que le escribiese dándole las gracias por el álbum?» Las palabras del niño acababan de sugerirle a la madre una profunda lección espiritual. En unos minutos la carta estuvo escrita y echada al correo. Al poco tiempo recibió la respuesta, que decía:

«Querido Jorge: No he olvidado la promesa que te hice del álbum, y traté de adquirir uno como lo deseabas, pero no pude encontrarlo de aquella clase; así que envié por él a Nueva York, no lo recibí hasta después de las Navidades, y después de todo no era la clase que tú querías; así que envié por otro, y como aún no ha llegado, te envío tres dólares para que compres uno en Chicago, como el que tú te proponías tener. Tu abuela que mucho te quiere.»

Al leer la carta, su rostro parecía el de un conquistador. « ¿No te lo decía, mamá?» Fueron las palabras que salieron de lo profundo de un corazón que nunca dudó; que «contra esperanza, creyó en esperanza» que el álbum llegaría. Mientras confiaba, la abuela estaba obrando, y en el tiempo oportuno la fe se convirtió en realidad.

La falta de visión espiritual es uno de los obstáculos humanos para fortalecer la fe en las promesas de Papá Dios, pero nuestro Salvador dijo a Tomás, y al gran número de personas que desde entonces le han seguido e imitado en la duda: «Bienaventurados aquellos que no han visto y han creído.»

Que en esta mañana nos estimule espiritualmente la fe del niño Jorge y cada promesa de nuestro Padre Celestial la podamos visualizar en nuestro espíritu, aceptando y confesando las cosas que novemos como si estuvieran ya en el mundo natural, por la seguridad que poseemos en sus promesas. Gracias Señor por tu Promesas.

 

Lecturas bíblicas: Marcos 11: 19-26.

Para su comodidad le dejo el link:

http://www.biblegateway.com/passage/?search=Marcos%2011:19-26;&version=59;

 

Gracia y Paz

Rev. Nelson Castellanos T.

Centro Internacional Sembradores de Fe y Vida.

Colombia - Bogotá D.C