Centro Internacional Sembradores de Fe y Vida
Marzo 26
MAS QUE VENCER SOBRE UNO MISMO
Lecturas bíblicas: 1ª Juan 2; 14-17. Efesios 6; 11-18.
Canción de Alabanzas: Más que vencedores
Romanos 8:37 Pero en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó.
Nosotros vamos a Cristo por perdón, y luego, muy a menudo, buscamos en la ley poder para combatir nuestros pecados. Pablo nos reprende en esta forma: « ¡Oh, gálatas insensatos! ¿Quién os ha fascinado a vosotros, ante cuyos ojos Jesucristo fue presentado públicamente como crucificado? Esto es lo único que quiero averiguar de vosotros: ¿recibisteis el Espíritu por las obras de la ley, o por el oír con fe? ¿Tan insensatos sois? Habiendo comenzado por el Espíritu, ¿vais a terminar ahora por la carne? » Lleva tus pecados a la cruz de Cristo, pues el viejo hombre sólo puede ser crucificado allí: nosotros estamos crucificados con El. La única arma para combatir el pecado es la lanza que traspasó el costado de Jesús.
Demos una ilustración: Tú necesitas dominar un temperamento colérico: ¿Cómo procedes? Es muy posible que tu nunca hayas intentado el correcto procedimiento, que es el de presentar a Jesús ese temperamento corrupto. ¿Cómo obtengo la salvación? Voy a Jesús tal cual soy, y confío en El para que me salve. ¿Debo sujetar asimismo mi temperamento colérico en el nombre de Jesús? Este es el único modo como puedo crucificar mi temperamento. Tengo que ir con él a la cruz y decir a Jesús: «Señor, yo confío en tu gobierno para que me libres de este mal.» Es la única manera de darle un golpe mortal a nuestro ego.
¿Eres codicioso? ¿Sientes que el sistema te seduce? Puedes batallar contra ese mal cuanto quieras, pero nunca serás librado de él de ningún otro modo que no sea por la sangre de Jesús. Llévalo a Cristo. Dile: «Señor, yo confío en Ti; tu nombre es Jesús nombre sobre todo nombre, pues Tú salvas a tu pueblo de sus pecados. Señor, éste es uno de mis pecados: libérame de él.»
Tus oraciones, tus arrepentimientos y tus lágrimas no valen nada aparte de la gracia de Cristo. Ninguno, excepto Jesús, puede hacer buenos a los pecadores y santos por su gracia. Tú debes ser vencedor por medio del que te amó, si vencedor quieres ser. Declara el nombre sobre todo nombre, declara el nombre Jesús sobre tu vida y deja que el gobierne tus temperamento Del libro «Lecturas Matutinas».
Lecturas bíblicas: 1ª Juan 2; 14-17
Para su comodidad le dejo el link:
http://www.biblegateway.com/passage/?search=1%20Juan%202:%2014-17;&version=59;
Gracia y Paz
Rev. Nelson Castellanos T.
Centro Internacional Sembradores de Fe y Vida.
Colombia - Bogotá D.C
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