Sembradores de Fe y Vida

miércoles, 1 de diciembre de 2010

Venciendo la Angustia V Parte

Centro Internacional Sembradores de Fe y Vida
 
Diciembre 2
Venciendo la Angustia  

V Parte  

Venciendo la Angustia  
Lectura bíblica: Filipense 4: 4-20

Filipense 4: 6 Por nada estéis afanosos (angustiado); antes bien, en todo, mediante oración y súplica con acción de gracias, sean dadas a conocer vuestras peticiones delante de Dios.



Hoy finalizamos el tema del devocional sobre la angustia. Como remedio contra la preocupación que confunde se recomienda la constancia en la oración.

La cura para la preocupación consiste en echar toda la ansiedad sobre Dios y en apoyarse en él (1 P. 5:7; Fil. 4:6). En otras palabras, la cura para la preocupación es darse cuenta que no estamos solos para hacer frente a la vida, que Dios está con nosotros.

«En toda oración y ruego», quiere decir, no solamente cuando la casa está ardiendo, o la esposa o los hijos están enfermos al borde de la sepultura, o en el conflicto económico, sino que los asuntos pequeños de la vida se deben poner delante de Papá Dios y quedar tranquilos. Las cosas pequeñas, por muy peque­ñas que sean, lo que el mundo llama insignificante, debemos ponerlo todo en comunión sagrada con nuestro Padre Ce­lestial y con nuestro bendito Señor Jesús durante todo el día. Y cuando despertamos por la noche, por una especie de instinto espiritual, debemos volver a Él y hablarle de nuestro deseo de aprovechar aquel tiempo perdido para poner delante de El nuestros pequeños asuntos, las dificul­tades familiares, de nuestros negocios y de nuestra profe­sión; cualquier cosa que nos preocupe, sea de la forma que sea.

«Con oración y ruego», significa con celo y con perseverancia, continuando y esperando con paciencia la respuesta de Dios.

«Con hacimiento de gracias», quiere decir que en todo tiempo debiéramos tener una buena base para la acción de gracias. Aunque todo lo demás nos falte, debemos tener presente que El nos ha salvado del infierno. También, que nos ha dado su palabra, su Hijo, su don escogido, y el Santo Espíritu. Por lo tanto, tenemos razones más que sobradas para la acción de gracias, sean cuales sean nuestras circunstancias.

Y la paz de Dios, que sobrepuja todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros entendimientos en Cristo Jesús. Filip., 4: 7. Esta es una bendición tan grande, tan verdadera y tan valiosa, que para comprenderla hay que conocerla por experiencia, porque sobrepuja todo entendimiento. Guardemos estas cosas en nuestros corazones y el resultado será glorificar a Dios mucho más de lo que hasta aquí hemos hecho, sin habituarnos a proceder en las dificultades como la gente de nuestro siglo, que no tienen ningún Padre Celestial.

Lecturas bíblicas: Filipenses 4: 4-20
Para su comodidad le dejo el link: un click.

Bendiciones en este día
Gracia y Vida
Rev. Nelson Castellanos T.
Centro Internacional Sembradores de Fe y Vida.
Colombia – Medellín - Antioquia

No hay comentarios:

Image Hosted by ImageShack.us